Quién alguna vez no se ha maravillado al ver enormes anuncios publicitarios en las calles y avenidas de nuestra ciudad capital. Las principales arterias limeñas están siendo invadidas dìa a día por enormes paneles causantes de innumerables accidentes de tránsito. Avenidas como Javier Prado, Canadá, Arequipa, Salaverry, la Marina y la Vía expresa, son algunas de las que conforman interminable lista de avenidas que tienen plasmada en su ruta la contaminación visual.
Al salir a diario de casa y hacer nuestro recorrido cotidiano, observamos còmo hermosas modelos llaman la atención con sus exuberantes figuras que resaltan los paneles publicitarios.
Publicidad en todas partes, como en la avenida Canevaro de Lince.Este tipo de contaminación ya no es ninguna novedad. Es un problema universal y el Perú no está apartado de dicha realidad. La proliferación de paneles y torres unipolares, denominados también publicidad exterior fija, aumentan sin control en todos los distritos. Las empresas también optan por plasmar sus marcas o productos en las fachadas de casas que se encuentran en lugares visibles para el público.
Casas de avenidas son acondicionadas para fines publicitariosEs el tipo de contaminación más subjetiva que existe, en comparación con las formas de contaminación tradicional, como la contaminación del agua, del suelo o del aire.
Es lamentable que el exceso y la búsqueda de maneras cada vez más impactantes de hacer publicidad, afecten la tranquilidad de las personas. Los espacios urbanos representan el hábitat de los seres humanos y muchas veces son un lugar de albergue, goce o contemplación, pero en otras ocasiones puede convertirse en perturbadora agresividad por la contaminación visual.
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